FC Barnsley

El Barnsley FC se fundó en 1887 y compitió en varias ligas regionales antes de incorporarse a la Liga de Fútbol en 1898. Como muchos clubes ingleses, debe su existencia a la iglesia, ya que fue fundado por el reverendo de una congregación local llamada Barnsley St Peters, de la que tomó su nombre. Durante su primera década, lucharon en la Segunda División, en parte debido a las dificultades financieras. Poco después, en 1912, el club ganó la FA Cup contra el West Brom.

Se trasladó a su actual estadio de Oakwell pocos años después de su formación, tras haber jugado inicialmente en un campo inclinado cercano que les ofreció un empresario local con la promesa de que "se portaran bien". A partir de estos humildes comienzos, un club con raíces de clase trabajadora en su núcleo, que representa a una ciudad minera de Yorkshire, se convirtió en un equipo casi omnipresente en la segunda categoría del fútbol inglés a lo largo del siglo XX. El club ha tenido muchas insignias diferentes a lo largo de los años, pero su logotipo actual es el que más recuerda a su historia. Contiene el escudo de la ciudad, flanqueado por dos mineros. Esta insignia sustituyó a la anterior, que contenía un bulldog, Toby Tyke, una especie de mascota del club. Este nombre proviene de la palabra "tyke", que es la jerga para una persona de Yorkshire. De ahí viene también el apodo de "The Tykes", que, junto con el de "The Reds", sigue siendo muy utilizado hoy en día.

Antes y después de la Segunda Guerra Mundial, el Barnsley se movía entre la segunda y la tercera categoría del fútbol inglés. Esto cambiaría y se iniciaría una era de consistencia en la Segunda División con la aparición de varios jugadores legendarios. En 1949, el Barnsley fichó a un joven de 23 años llamado Danny Blanchflower, que impresionó tanto durante su estancia en Oakwell que, dos años más tarde, se marchó al Aston Villa y, finalmente, al Tottenham Hotspur, donde fue elegido Jugador del Año en 1961 y capitaneó al club londinense en la consecución del primer doblete de liga y copa del siglo XX. Por aquel entonces, otra leyenda del Barnsley se abrió paso con Tommy Taylor. Anotó 26 goles en 44 partidos con el Barnsley antes de convertirse en uno de los jugadores más caros del fútbol inglés hasta ese momento, cuando el emblemático entrenador Matt Busby lo fichó para el Manchester United en 1953. En los años siguientes se convertiría en un prolífico goleador tanto para el United como para Inglaterra, antes de que su carrera y su vida se vieran truncadas al morir en el desastre aéreo de Múnich en 1958.

Después de haber pasado la mayor parte de su tiempo hasta entonces en la Segunda División, e incluso haber coqueteado ocasionalmente con el ascenso a la máxima categoría, el Barnsley descendió a la Tercera División en 1959, iniciando así un período difícil para los Tykes. Desde entonces hasta 1981, pasaron dos décadas languideciendo en la tercera o incluso en la cuarta división, cuando realmente tocaron fondo. Fue una época para olvidar para el equipo de Yorkshire.

A lo largo de la década de 1980, el club se encargó de retomar la normalidad y volvió a formar parte del mobiliario de la Segunda División. En 1992 se creó la Premier League y, por tanto, el Barnsley pasó a formar parte de la recién nombrada Primera División. Durante los cinco años siguientes lucharon por el ascenso, pero no lo consiguieron por diversos motivos. Sin embargo, al final de la campaña 1996-97, un equipo dirigido por el ex jugador Danny Wilson, que contaba con leyendas de culto como el defensa holandés Arjan de Zeeuw y el máximo goleador Neil Redfearn, logró por fin el ascenso a la máxima categoría de la pirámide futbolística inglesa tras 99 años de intentos.

Desgraciadamente para los Reds, su tiempo en el candelero duró poco, ya que la temporada siguiente terminaron en el puesto 19 y descendieron de nuevo a la Primera División. Desde entonces han pasado más de dos décadas en lo que ahora se conoce como The Championship, previsiblemente la segunda división, su hogar natural. Ha sufrido un par de descensos a la League One, pero en su mayor parte ha luchado con uñas y dientes para mantenerse en la segunda división, sin amenazar, por desgracia, con volver a la máxima categoría.

El año pasado dejaron hasta el último partido de la temporada contra el Brentford para asegurar su supervivencia, viviendo peligrosamente durante toda la campaña. Esta temporada se espera que se enfrenten a un nuevo reto, pero con el capitán Alex Mowatt y el destacado defensa austriaco Michael Sollbauer, entre muchas de las figuras que brillan en su actual plantilla, puede que sorprendan a unos cuantos. Lamentablemente, sus mayores rivales, el Leeds United y el Sheffield United, están actualmente en la Premier League, pero los aficionados pueden esperar los derbis locales contra el Sheffield Wednesday, el Huddersfield y el Rotherham esta temporada.