Chelsea FC

El Chelsea Football Club fue fundado en 1905 por el empresario inglés Gus Mears. Inicialmente había comprado el entonces Estadio de Atletismo de Stamford Bridge con la idea de alquilarlo a un club de fútbol ya existente, pero cuando un acuerdo con el cercano Fulham FC fracasó, Mears decidió fundar un nuevo club y nació el Chelsea. "Los Blues" todavía juegan sus partidos en casa en lo que ahora se conoce coloquialmente como "The Bridge".

El Chelsea recibió el apodo de "Los Pensionistas" durante la mayor parte de su historia hasta mediados de los 50, debido a su asociación con un hospital local que albergaba a veteranos de guerra británicos. Esta conexión aún vive hoy en día, con ocho afortunados ancianos invitados como visitantes a todos los partidos en casa en Stamford Bridge. Los afortunados pensionistas son seleccionados a través de una lotería semanal. Sin embargo, el apodo en sí fue dejado de lado bajo las instrucciones de Ted Drake, quien asumió el cargo de gerente en junio de 1952. Drake sintió que el apodo avergonzaba al club y decidió dejarlo a favor de "The Blues".

El Chelsea siempre ha sido un equipo de grandes delanteros. El hombre conocido como el jugador al que nunca debieron haber vendido, Jimmy Greaves, anotó 132 goles en 169 partidos en un período de cuatro años a finales de la década de 1950. Bobby Tambling fue otro prolífico goleador del club, con 202 goles en 360 partidos en un período de 11 años con "Los Azules", que incluyó su regreso a la primera división en 1963.

Sin embargo, el gol no se detuvo hace 50 años. En la era moderna, Didier Drogba se proclamó como uno de los mejores delanteros del Chelsea. Bajo la dirección del emblemático José Mourinho, y con la ayuda de las leyendas del club, John Terry y Frank Lampard, el impenetrable marfileño ayudó al club a ganar varios títulos nacionales y europeos. Durante su primera etapa en el club, marcó 100 goles en 226 partidos, entre ellos algunos de los más importantes de su historia. En particular, su gol del empate tardío y el posterior penalti de la victoria en la final de la Liga de Campeones de 2012 en el Allianz Arena de Munich, ayudaron al Chelsea a derrotar al poderoso Bayern de Munich en su propio patio trasero para convertirse en campeón de Europa, un momento que será recordado por los aficionados al fútbol de todo el mundo durante muchos años.

Geográficamente hablando, el Chelsea juega derbis locales contra otros equipos del oeste de Londres, el Fulham y el Queens Park Rangers. Sin embargo, debido al abismo de clase y logros de las últimas décadas entre ellos, estos partidos no influyen tanto en los fieles como la visita de otros aspirantes al título como el Manchester United, el Arsenal o el Liverpool.

Con una plantilla llena de jóvenes jugadores de calidad a su disposición, la presión recae ahora sobre Frank Lampard para que entregue más trofeos a un club que, en los últimos tiempos, ha conseguido varias coronas de la Premier League, Copas de la FA e incluso trofeos europeos.